Todos queremos volver a la “normalidad” cuanto antes. Pero parece que todavía no somos conscientes de que nada volverá a la normalidad después de unas semanas, ni siquiera de unos meses. Y algunas cosas nunca volverán a ser como antes.
¿Por qué deberías volver a la normalidad? Sí, es la forma en la que te sientes cómodo, es lo que ya conoces. Pero ¿qué tal si en vez de preocuparte por la vieja normalidad, adoptas un nuevo enfoque? Uno que dice «espera, habrá una nueva normalidad, no sé cómo será y todavía no la entiendo, pero voy a explorarla y voy a aprovecharla al máximo«.
Te prometo algo: la nueva normalidad viene con posibilidades que la vieja no tenía. Y delante de ti tienes una oportunidad única de hacer de ella algo extraordinario.
1. Siempre hay una mejor manera. No hay nada que estés haciendo hoy en tu vida que no puedas mejorar. Nada. Y la pandemia te trae una oportunidad increíble de descubrirlo, porque hoy no puedes hacer las mismas cosas o seguir el mismo camino de siempre. De repente te enfrentas a desvíos y callejones sin salida. Pero en vez de frustrarte por no poder hacer lo que hacías antes, toma el desvío y aprovecha al máximo el nuevo recorrido, porque vas a ver cosas que nunca has visto, irás a lugares donde nunca has estado, experimentarás cosas que nunca has vivido.
Entrégate de lleno. No te guardes nada. Enfrenta este nuevo camino dispuesto a descubrir que siempre, siempre hay una mejor manera de hacer las cosas.
2. Tienes más potencial del que crees. Las lecciones más importantes de tu vida han surgido en momentos en los que te viste obligado a cambiar. No tuviste elección. Porque cuando te ves forzado al cambio, tu perspectiva de la vida se vuelve increíblemente diferente. Y hoy te está revelando cosas que jamás hubieras descubierto de otra manera.
No limites tu potencial. Lo que puedes hacer depende de cuánto crees que puedes hacer. Cuando realmente crees que puedes hacer más, tu mente te muestra el camino. La brecha entre lo que estás haciendo hoy y lo que tienes capacidad de hacer es tu determinación para mejorar. Así que a partir de hoy empieza cada día con la mentalidad de «hoy voy a ser mejor que ayer”. No habrá nada ni nadie que te detenga.
3. Tienes el poder de elegir. No permitas que lo que otras personas digan sobre la situación que vivimos controle cómo piensas y lo que haces. No dejes que los pensamientos negativos, el miedo o la incertidumbre de los demás invadan tu mente. Simplemente no lo permitas. Tú eliges cómo enfrentar el nuevo camino que tienes por delante. Es tú decisión, de nadie más.
No niegues la situación en la que te encuentras, solo reformúlala. Replantea la situación para que puedas verla de manera realista, sí, pero al mismo tiempo, de manera creativa, buscando todas las oportunidades que puedas encontrar en medio de la adversidad.
No sé qué te depara el futuro. Lo que sí sé es que, si hoy lo decides, ese futuro será mejor que cualquier visión que hayas tenido y más grande de lo que imaginaste para tu vida.
Rafael Avilés Ledergerber
Presidente Ejecutivo, Ecuaprimas

La vida es bella independientemente de la circunstancia del momento. Tenemos que vivir conectados con la energía de nuestro ser interior. Esa es la elección.
Felipe Dueñas